Composta: cómo convertir las hojas secas de los árboles en tierra fértil

Hacer composta puede ser bastante simple.

Si tienes muchas hojas, ya sea porque se secó alguna planta o por ser otoño, puedes apilarlas en un lugar (preferentemente sombreado y al exterior), humedecerlas constantemente y pronto comenzarás a ver a los microorganismos descomponedores actuar (esas pequeñas manchas blancas en las hojas) para transformar la materia orgánica en humus (no necesariamente requieres lombrices).

Puedes añadir restos de cocina u otros residuos verdes, pero las hojas por sí solas hacen una muy buena composta ya que, en general, su relación carbono-nitrógeno está balanceada, permitiendo que los microorganismos puedan actuar correctamente (es decir: sin tener que agregar nada más).

Así mismo, las hojas crean espacios porosos de aire que estos pequeños trabajadores necesitan para respirar, por lo que tampoco necesitas estar revolviendo. Solo recuerda humedecer las hojas regularmente para que la descomposición sea más rápida (pero no encharques).

El tiempo de descomposición varía dependiendo de la temperatura, la humedad y el tipo de material que se esté compostando (hay hojas más duras y fibrosas y hojas más suaves, pequeñas y acuosas).

Recuerda: los residuos de las plantas NO son basura. Nada en la naturaleza se desperdicia. La naturaleza nos da todo lo que necesitamos.

Pronto tendrás una tierra con muchos nutrientes.

Si quieres aprender más sobre cómo hacer composta te enseño en el siguiente video: